De manera unánime, el Concejo Deliberante de Lomas aprobó este beneficio impositivo a favor de vecinos y comerciantes que se vieron afectados por el incendio del establecimiento.
Vecinos y comerciantes que se vieron afectados por el incendio del ex frigorífico La Victoria de Temperley, ocurrido hace un año, serán beneficiados con la eximición del pago de tasas, según aprobó el Concejo Deliberante de Lomas de Zamora en su última sesión.
Como consecuencia del siniestro ocurrido en el establecimiento ubicado en Dinamarca 3242, y ante el riesgo de derrumbe de varias paredes del edificio, el tránsito de la avenida Armesti, entre Erickson y Groussac, permanece cortado desde entonces, afectando la vida comercial de la zona y generando mayor inseguridad.
El proyecto fue sancionado de manera unánime. El mismo beneficia a los damnificados con la eximición del pago de las tasas de Servicios Generales y de Seguridad e Higiene.
Concejales del oficialismo y de la oposición celebraron el haber dado respuesta al reclamo de los frentistas y comerciantes de la zona.
Por otra parte, el Concejo aprobó otro proyecto para ordenar la demolición de las paredes con riesgo de derrumbe, para poner fin a una situación de por sí muy peligrosa.
La maratónica sesión, que se prolongó por más de 10 horas, comenzó con un homenaje a César Bértoli, edil de la UCR que formaba parte del bloque Cambiemos, que falleció a los 64 años a causa de una enfermedad pulmonar que padecía. Es el segundo deceso que sufre el cuerpo en lo que va del año, junto al recordado Santiago Carasatorre.
Una de las iniciativas que logró prosperar fue la adhesión a la Resolución provincial que prohíbe la circulación de motos particulares con dos o más personas. Aunque los fundamentos de la medida son sanitarias, porque busca prevenir los contagios de Covid-19, apunta a combatir a los motochorros, ante el aumento de esta modalidad delictiva.
No corrieron la misma suerte los proyectos presentados por la oposición, que fueron girados a comisión, a pesar de que muchos referían a realidades que necesitan una urgente respuesta por parte del gobierno, como ser los protocolos para la apertura de locales gastronómicos, poder petaonalizar calles, para reabrir los gimnasios y la práctica de ceremonias religiosas y reuniones públicas y privadas al aire libre, entre otros.