Sin agua y comida, una proteccionista de la organización “Colitas a Casa”, de Quilmes, libró a su suerte a decenas de animales encerrados en una casa. Apenas sobrevivieron dos.

Perros muertos y cachorros en estado de putrefacción, cuyos cadáveres fueron hallados adentro de bolsas y hasta ocultos en armarios, fue el espeluznante escenario con el que se toparon efectivos policiales al allanar un refugio de mascotas en Quilmes, tras las reiteradas denuncias de abandono por parte de organizaciones proteccionistas de la zona e, incluso, de los vecinos de la cuadra, que -durante semanas- alimentaron a los animales arrojando comida y agua desde los techos.

El hogar de animales “Colitas a casa” se transformó en un verdadero cementerio de perros y todas las denuncias apuntan contra la responsable del lugar, a quien acusaron de dejar a su suerte a decenas de canes que murieron de hambre y sed. Sólo dos de ellos lograron sobrevivir.

El refugio en cuestión funcionó hasta entonces en una vivienda deshabitada, ubicada en la calle Roque Sáenz Peña, entre Corrientes y Entre Ríos. La aberrante situación salió a la luz en redes sociales y, luego, se llevó a cabo una denuncia en la Comisaría 3ra. de Quilmes, tras lo cual se concretó el allanamiento policial.

Los agentes que ingresaron a la casa encontraron a la mayoría de los animales muertos, sin comida ni agua, y algunos cachorros dentro de bolsas en estado de putrefacción, mientras que sólo dos perros pudieron ser rescatados, Coronel y Bruna, quienes ahora están a cargo de ADOPCANEM a la espera de tránsito.

Las organizaciones de la región repudiaron el hecho, a la vez que explicaron que trabajaban constantemente con la encargada de Colitas a Casa, ya que se trataba de una persona que “siempre le conmovió el maltrato y abandono animal”.

Según detallaron, el refugio funcionaba en una casa deshabitada que solía utilizar para dar tránsito a mascotas, pero desde hace meses, varios usuarios en redes sociales dieron a conocer la situación, mientras que los vecinos desde sus techos y medianeras se vieron obligados a alimentar a los perros que se encontraban en el patio del lugar.

Tras el escándalo, la joven acusada, que tiene 24 años estudia veterinaria y trabaja en un centro médico de animales de Berazategui, borró sus redes sociales.

Por su parte, desde la cuenta de Instagram @callejerospcq señalaron: “REPUDIAMOS TOTALMENTE EL ACCIONAR DE ESTA PERSONA Jimena “Cutts” Sánchez de Colitas a Casa (Quilmes). Dejó a su suerte animalitos rescatados de OTROS MALTRATADORES. Se suponía que tenía un hogar de tránsito y ella se ocupaba de alimentarlos, darles de beber y demás cuidados. Nada de eso estaba ocurriendo, literalmente los estaba dejando morir”.

Asimismo, desde esa cuenta, perteneciente a otro refugio de la zona, indicaron: “Hoy se allanó ese lugar y las imágenes son nauseabundas, no entra en la cabeza!!. Había cuerpos de animalitos muertos en armarios y bolsas con restos. Se lograron rescatar vivos a Coronel y Bruna (así los había apodado). Y más allá de ellos dos, esta chica tenía a varios rescatados en hogares de tránsitos particulares (los cuales obviamente también dejó a sus suerte). Éstas personas abrieron las puertas de su hogar y hoy no tienen respuesta”.

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