Se trata del caso de Nicolás Carrizo, un ciclista que perdió la vida al ser atropellado por un conductor que circulaba, aparentemente, con exceso de velocidad por Berazategui.
Ante la falta de avances en la causa judicial por la muerte de Nicolás Carrizo, un joven ciclista que perdió la vida en 2020 al ser atropellado por un auto, su madre amenazó con encadenarse a la fiscalía de Berazategui para reclamar que progrese la investigación, dado que, según denunció, ya pasó casi un año y medio y el responsable “sigue en libertad”.
Desde el 26 de octubre de 2020, Carmela La Bionda convive con un dolor insoportable en el pecho. Y ese pesar se agrava por la sensación de falta de justicia. “No tenemos ninguna respuesta de la fiscalía, no nos reciben personalmente aduciendo que por la pandemia sólo podemos comunicarnos vía mail, pero siempre tardan en contestarnos, incluso a los abogados”, explicó la mamá de Nicolás.
Su hijo practicaba ciclismo, una pasión heredada de su padre. La fatídica tarde de su muerte, cerca de las 15, Nicolás y su papá circulaban por la Avenida Vergara cuando, en el cruce con Antártida Argentina, una camioneta Peugeot Partner lo atropelló y lo dejó gravemente herido.
El joven fue trasladado al hospital El Cruce de Florencio Varela, donde falleció el 1º de noviembre a raíz de politraumatismos en la cabeza que le provocaron coágulos, lo que provocó la falta de oxigenación del cerebro.
Por su parte, el conductor de la camioneta fue demorado en la comisaría, pero a las pocas horas quedó en libertad. “Este hombre hoy está libre y nosotros estamos destrozados. Incluso sigue manejando pese a que las pericias determinaron que circulaba a casi el doble de la velocidad permitida”, explicó La Bionda.
Por las marcas de la frenada del la Partner, circulaba aparentemente a 72 kilómetros por hora, cuando la velocidad permitida en esa zona es de 40. “La gran mayoría de los testigos dice que esta persona venía a muy alta velocidad y otros dicen que mi hijo pasó en rojo”, agregó.
Cámara de seguridad
Una cámara de seguridad filmó el trágico episodio y las imágenes fueron aportadas a la causa, pero la familia Carrizo no las pudo ver, motivo por el cual contrataron peritos de parte.
“Lo que buscamos es justicia por Nicolás, que la investigación avance. Lamentablemente, si no avanza esto me voy a encadenar en la fiscalía hasta que la fiscal me reciba”, amenazó la madre y, luego, remarcó con angustia: “Sentimos la necesidad de ser escuchados, que la causa de mi hijo no quede encajonada y que su asesino no pueda circular libremente. Sé que nada nos devolverá a nuestro hijo, pero quien le arrebató su vida debe hacerse responsable de sus actos”.
Canalizar el dolor
Carmela La Bionda, asesorada con abogados y con la ayuda de Vivian Perrone, de Madres del Dolor, busca crear una Asociación Civil que lleve el nombre de su hijo, en donde se eduque en vialidad y se den cursos de Reanimación Cardio Pulmonar (RCP).