Un hombre de 47 años fue detenido por efectivos policiales en Ezpeleta, donde en apariencia funcionaba un local de venta de comidas, pero era la fachada para ocultar su verdadero negocio.

Efectivos policiales detuvieron en Ezpeleta a un comerciante apodado como “pizzero dealer”, un hombre de 47 años que utilizaba una casa de comidas como pantalla para la venta de estupefacientes a distintos clientes, que le pedían en clave “la especial de orégano” y, luego, recibían el paquete a domicilio en manos de un delivery.

La captura del acusado se concretó en las últimas horas, cuando, personal de la Comisaría 2da. de Bernal allanó una vivienda ubicada en la calle Paraguay al 400, en Ezpeleta, donde, en apariencia, funcionaba un comercio de venta de pizzas y empanadas.

Sin embargo, una denuncia anónima alertó a los investigadores sobre verdadero negocio que hacía el llamado pizzero dealer. A partir de ese momento comenzó una investigación que permitió identificar el modus operandi del sospechoso.

Según señalaron fuentes oficiales, este sujeto repartía a sus clientes dosis de marihuana dentro de las cajas de pizza que enviaba junto al delivery. Pero, además, los investigadores establecieron que algunos clientes llegaron a mencionar el “código” para pedir las drogas, que era “la especial de orégano” o, también, el “agregado de empanadas de verduras”.

De esta manera, el pizzero armaba los pedidos con estupefacientes y un motociclista hacía el reparto a domicilio.

Reunidas las pruebas por parte de la Policía, desde la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 20 del Departamento Judicial Quilmes, a cargo de la fiscal Clarissa Antonini, solicitaron al Juzgado de Garantías en turno un pedido de allanamiento en la falsa pizzería.

El magistrado convalidó la petición y se llevó a cabo, en horas nocturnas, un operativo que permitió la detención del acusado y el secuestro de 1,106 kilogramos de marihuana, fraccionada en gran cantidad de bolsas de nylon preparadas en el interior de la casa, así como también de varios elementos de prueba para la causa.

Hasta el momento, el falso pizzero permanece bajo arresto por el delito de “tenencia de estupefacientes para su comercialización”.

Falso lavadero

Este caso tiene características similares a uno que salió a la luz en 2019, cuando una banda narco que hacía delivery de marihuana y tenía un lavadero de autos como pantalla para “blanquear” el dinero recaudado y para tapar su verdadera actividad, fue desbaratada en Quilmes tras una serie de procedimientos en los que fueron detenidas cinco personas.

La investigación también fue encabezada por la fiscal Antonini y por efectivos de la Jefatura Departamental quilmeña, que efectuaron las detenciones con apoyo de otras reparticiones como el grupo Halcón, Drogas Ilícitas y Policía Local.

El cabecilla de la banda tenía como pantalla un lavadero de autos ubicado en la avenida Mosconi, desde donde también se hacían repartos de los estupefacientes a los domicilios de los clientes.

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