El hecho ocurrió en una vivienda de Solano, donde la presunta víctima contó que un chico la siguió hasta el baño, ingresó por la fuerza, la encerró y abusó de ella.
Una fiesta de cumpleaños en San Francisco Solano terminó en escándalo, luego de que una joven, de 20 años, denunciara haber sido violada por un adolescente, de 18, que la siguió hasta el baño, ingresó por la fuerza, la encerró y abusó de ella, quien comenzó a gritar sin que nadie la escuchara por el elevado volumen de la música. A raíz de este hecho, familiares de la presunta víctima fueron al día siguiente hasta la casa del acusado y protagonizaron una pueblada con el objetivo de lincharlo, pero la Policía lo llevó detenido y evitó que lo mataran en un acto de justicia por mano propia.
Se trata de un episodio que generó conmoción en el barrio y motivó la salida de decenas de vecinos a las calles para protestar. El episodio tuvo lugar en una vivienda ubicada en el cruce de las calles 860 y 894, donde se habría desarrollado una reunión privada. Allí, la chica asistió para participar de la celebración de un cumpleaños y, según su declaración, terminó viviendo una verdadera pesadilla.
De acuerdo a su declaración, el abuso ocurrió el domingo pasado en horas de la madrugada, en momentos que se alejó de los integrantes de la reunión para ir al baño y habría sido perseguida por el sindicado agresor.
En la misma línea, testificó que un joven de 18 años se habría metido por la fuerza en el cuarto, la encerró y abusó presuntamente de ella. Al parecer, ninguno de los presentes en el lugar habría advertido estos movimientos ni escuchado nada, ya que el volumen de la música habría impedido que se oyeran los pedidos de auxilio de la joven.
Escapó como pudo
En estado de shock, la joven escapó como pudo de la vivienda y se dirigió hasta su casa, donde relató los hechos a sus familiares, quienes, horas más tarde, juraron tomar venganza contra el adolescente.
De ese modo, se organizaron junto con vecinos y allegados y se trasladaron hacia la casa del acusado, que se encuentra en inmediaciones de las calles 840 y 801, también en Solano. Decididos a lincharlo, comenzaron a atacar a piedrazos y botellazos la casa del supuesto violador y, en un momento, intentaron ingresar por la fuerza.
Pero cuando estaban a punto de entrar, varios móviles de la Comisaría 4ta. de Quilmes (San Francisco Solano) arribaron al lugar e impidieron la escalada de violencia. Al controlar la situación, lograron sacar al acusado de la casa y lo llevaron detenido a la seccional policial, donde quedó imputado por el delito de “abuso sexual” en el marco de una causa penal que se tramita en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº 8 del Departamento Judicial Quilmes, a cargo del fiscal Alejandro Ruggeri.
Pericias
La Fiscalía interviniente ordenó los correspondientes exámenes médicos para con la chica, a fin de determinar si presentaba lesiones compatibles con lo denunciado. De momento, el imputado quedó en libertad y se aguardan el resultado de nuevas pericias para avanzar con la acusación.