Alejandro Larumbe, titular de la cámara que representa al rubro a nivel local, aseguró que si se prolongan las restricciones del Gobierno Nacional “va a ocurrir un desastre”.

La Cámara de Gastronomía, Hotelería, Turismo y Esparcimiento de Quilmes advirtió que bares y restaurantes de la región “no pasan el invierno con restricciones”, dado que, de prolongarse las medidas de confinamiento estricto dispuestas por el Gobierno Nacional, un gran número de comercios del rubro “van a ir a la quiebra”, por lo que sus autoridades exigieron “al menos un aforo del 30 por ciento” para “evitar que muchas familias queden en la calle”.

Alejandro Larumbe, el titular de la Cámara (la tercera en importancia dentro de la Provincia de Buenos Aires), habló con El Quilmeño sobre la “grave situación” del sector en la región. En ese sentido, marcó la necesidad de contar con medidas de respaldo por parte del Estado, al que le exigen la sanción de “Ley de Emergencia Gastronómica” que contemple, entre otras cosas, “exención impositiva (no únicamente de Ingresos Brutos), créditos para pagar deudas, ayuda para pagar sueldos (Asistencia de Emergencia, Trabajo y Producción) y la vuelta del aforo del 30 por ciento en locales”.

“Si esto no cambia va a ser un desastre”, alertó el referente local de Gastronómicos, al tiempo que agregó: “Hace 430 días que venimos trabajando con restricciones. La mayoría están endeudados y se comieron los ahorros. Por lo bajo, muchos de nuestros socios nos cuentan que tuvieron que dejar de pagar impuestos y no pueden tener a los empleados en blanco. Los proveedores ya no dan crédito, porque primero quieren cobrar lo que se les debe. Si en los próximos meses no se genera una reactivación económica, mucha gente se va a quedar sin laburo”.

Asimismo, indicó que, según una encuesta del sector, “apenas el 8 por ciento de los gastronómicos es dueño de la propiedad en la que funciona su negocio” y que “la gran mayoría no puede pagar el alquiler completo” desde que comenzó la cuarentena. “Hoy en día estamos atendiendo hasta las 18 horas con sistema ‘Take Away’ y hasta las 23 con delivery, pero no alcanza. Necesitamos recibir nuevamente al público, el 70 por ciento de la facturación de un local es en horario nocturno y el 80 durante el fin de semana. Hay que buscar una alternativa para podamos trabajar y que muchos locales no vayan a quiebra”, enfatizó.

Por último, Larumbe afirmó que los gastronómicos “somos concientes de la pandemia y queremos contribuir”, pero “con la gente consumiendo”. “La gente está cansada del aislamiento y, de todos modos, se reúne en sus casas o en las plazas. Ahí no cumplen los protocolos. En cambio, si van a un bar o un restaurante nosotros los hacemos respetar la distancia, le tomamos la temperatura y los proveemos de alcohol en gel”, argumentó.

“Ciudad Gastronómica”

Finalmente, adelantó que el viernes 4 de junio mantendrán una reunión con la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, para hablar sobre estos temas y, además, para acercarle un proyecto denominado “Quilmes Ciudad Gastronómica”, en el que también participa la Universidad Nacional de Quilmes.

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