El joven, que tenía 23 años y había sido papá meses antes de su homicidio, murió en septiembre de 2019. En el banquillo del Tribunal Oral Criminal Nº 1 de Quilmes hay un sólo acusado.
En el Tribunal Oral Criminal (TOC) N° 1 de Quilmes comenzó el juicio contra el único acusado por el asesinato de Nahuel Zacarías, el joven que regresaba de trabajar en su moto cuando, durante un intento de robo en el Acceso Sudeste, recibió un ladrillazo que lo hizo estrellarse contra un columna.
Los jueces Cecilia Maffei, Marcela Vissio y Fernando Celesia comenzaron a escuchar a los testigos convocados en el debate, que se desarrollará toda esta semana en la sede de Yrigoyen 475.
El imputado por los hechos es Héctor Coronel, que deberá dar cuentas ante la Justicia como presunto autor material de “homicidio con dolo eventual”. Según consta en la causa, a las 22.50 del 22 de septiembre de 2019, en momentos en que Nahuel circulaba con su moto en inmediaciones del Acceso Sudeste, fue sorprendido en su paso por un sujeto que caminaba por la banquina en sentido contrario a la circulación de la víctima, “que actuando con total desprecio por la vida, eligió como víctima a Zacarías arrojandole un objeto contundente que le hizo perder la estabilidad colisionando contra una columna de concreto, lo que ocasionó lesiones de consideración que le provocaron el deceso”.
El ataque quedó registrado por una cámara de seguridad y la noticia tuvo gran repercusión en los medios de comunicación. Varios días después, el sospechoso fue detenido y las pericias del video informaron un 100 por ciento de coincidencia con las características de la persona que atacó a Nahuel. También fue aportado como prueba un celular secuestrado, que lo ubican en ese horario bajando de Acceso.
Un hijo sin su padre
Nahuel tenía 23 años y había sido padre pocos meses antes de su asesinato homicidio, a la altura del Triángulo de Bernal.
Según se supo, los criminales eran un grupo de personas que quemaban basura en la calle y que pretendían hacerlo frenar para asaltarlo. Al percatarse de la situación, Nahuel había intentado eludirlos y allí fue cuando lo apedrearon hasta propinarle el certero ladrillazo que lo hizo chocar y que, tras varios días de agonía, terminó con su vida.